sábado, 25 de enero de 2020

IRRESPETO AL LIBERTADOR


IRRESPETO AL LIBERTADOR
Por Armando Pérez Araújo
Soy amigo personal de muchos árabes residentes en Maicao, La Guajira, a tal punto de que en mis escritos públicos y otras intervenciones he propugnado por posibilitar en esta región política de Colombia la implementación del respeto a la diversidad étnica y cultural, de tal manera que, en el caso de Maicao, he opinado a favor de que se le asegure a esta importante colonia una o dos curules en el concejo municipal, dentro de un universo mayoritariamente indígena. Hasta ahí llega lo que podríamos llamar el enfoque étnico y cultural hacia una reforma electoral territorial inclusiva, respecto a una respetable comunidad activa social y económica, como lo es la colonia árabe de esta ciudad, claramente indígena, repito. Pero una cosa es una cosa y otra cosa es otra cosa. Una cosa es eso que acabo de expresar, y otra bien distinta es que el alcalde árabe, señor Muhammad Dasuki, quite del Despacho del Alcalde, no de la sala ni del comedor de su casa, el cuadro de un símbolo de las libertades patrias y de nuestra democracia, Simón Bolívar, para colocar una sura o azora, es decir, uno de los 114 capítulos en que se divide el Corán, el libro sagrado del Islam. Por supuesto que no tengo nada contra la libertad de expresión del alcalde árabe, mucho menos contra la respetabilidad del Corán, pero me parece irrespetuoso con uno de los símbolos de nuestra democracia que por razones cosméticas, ojalá que así sea, o políticas, creo que no, ojalá que no, se atropellen conceptos de tan arraigada aceptación democrática como son los emanados de la figura del libertador. El señor Muhammad Dasuki quedó parqueado muy cerca del código penal, en materia de vulneración de un símbolo patrio, pero sí es claro que se pasó por la faja un sentimiento político muy respetable del pueblo colombiano. Quiero creer que es posible que el alcalde de marras, por desconocimiento supino de la tradición política colombiana, no alcanzó a comprender lo grave de esta metida de pata, lo que es muy grave es que tampoco calcule el daño que le puede hacer a tanta gente laboriosa y emprendedora de la comunidad árabe que seguramente podría resultar políticamente pringada por la irrazonable y ligera medida suya.

1 comentario:

  1. Sería muy valido de su parte hacer la corrección y retractarse de semejante acusación mi estimado amigo

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